Antonio Gavira Albarrán
JUSTIFICACIÓN.
El espacio que ocupa la cuenca alta del río
Guadaíra siempre ha quedado lejos. Desde la comarca de “Los Alcores” únicamente
podemos ver la sierra de Esparteros y su gigantesca cantera que, año tras año,
vemos crecer, temiendo que algún día esta sierra quede dividida en dos, y más
allá, una línea de pequeñas sierrecillas, mucho menos definidas, donde se
encuentra Pozo Amargo, el “nacimiento oficial del río Guadaíra”.
Pero
la serranía de Morón de la
Frontera no es fácil visitar de forma regular, de descubrir,
para una persona que venga de fuera, es necesario acudir acompañado de alguien
que conozca la sierra y sus gentes, esto sin contar con que se trata de un
espacio compartimentado por innumerables vallados, alambradas metálicas, que
imposibilitan el tránsito normal por caminos públicos, vías pecuarias o
riberas. Muchos particulares se consideran “propietarios” de la misma sierra,
de la tierra, de las aguas, de la vegetación y hasta de los animales, ya sean
mamíferos, aves o reptiles.
Figura I: La capellanía desde el cerro de la Plata.
La
oportunidad surgió, cuando en la
Navidad de 2005, Juan Pablo nos invitó a conocer la finca del
Risquillo, el cerro de La Plata,
y el arroyo de Talavera. El pequeño grupo de amigos que acudimos, Octavio,
Cristóbal, David, Pepe, Antonio y nuestro anfitrión Pablo, no pudimos más que
quedar asombrados de los paisajes que durante toda la jornada fueron
sucediéndose ante nuestros atónitos ojos. Pequeñas dehesas de encinas y
matorral, vaguadas transitadas sólo por los animales, donde no faltaba el
quejigo, el madroño o la cornicabra; praderas verdes moteadas de algunas
encinas; cerros desde donde nuestra mano parecía alcanzar otras sierras más
lejanas, Lijar, Grazalema, el Tablón; y numerosos arroyos, pequeños quizá, pero
dentro de un entorno, de un espacio, que le confieren una belleza excepcional.
Figura II: Unión de los arroyos
Lentisquillo y Almendrillo.
Por
eso cuando a finales de 2006 Pablo Morilla me propuso colaborar en un proyecto
para el estudio de los arroyos de la cuenca alta del río Guadaíra no lo dudé,
pues vi en él la oportunidad de conocer un poco más el río Guadaíra, el río que
pasa por mi pueblo, Alcalá, que le ha dado seña de identidad, Guadaíra, una
oportunidad de comprender el río en su conjunto.
Metodología.
·
Trabajo
de campo.
o Visitas: El día
02 de abril de 2007, al inicio de la primavera, se realizó una visita de
contacto a la zona. El segundo día
de trabajo se produjo el día 14 de mayo de 2007, en esta ocasión para realizó
un estudio más pormenorizado del arroyo del Almendrillo. Ambas visitas se llevaron a cabo por la tarde, recorriéndose ambas
márgenes del arroyo en el sector de estudio. En esta ocasión se observó que el cauce del arroyo de La Párraga aparecía
completamente seco, mientras que el arroyo del Almendrillo mantenía un pequeño
caudal.
o Recogida
de muestras de vegetación y toma de fotografías.
Durante
la visita a la zona han seleccionado dos cuadrículas de unos 25 m2 de superficie (5m. x
5m. de lado) para su estudio, una primera en la pradera y una segunda sobre el
arroyo de La Párraga. Se
ha lleva a cabo la identificación de todas aquellas especies conocidas y se han
tomado muestras de aquellos ejemplares que no se han podido identificar
directamente e igualmente se han fotografiado, para su posterior identificación
en gabinete. Posteriormente se ha recorrido minuciosamente el sector de estudio
con toma de datos referentes a la vegetación y suelos. Para poder tener una
visión general del sector se ha subido al Cerro de Los Poceros, una elevación
situada en la margen izquierda del arroyo, desde donde se ha tenido una
panorámica completa de la zona donde se ha realizado el estudio.
·
Trabajo
de gabinete.
Se han analizado los ejemplares de herbáceas
recogidos para su identificación y clasificación. Se ha estudiado el material
fotográfico recogido durante la visita realizada el día 14 de mayo de 2007 y el
que se ha dispuesto de años anteriores, lo que nos permite comparaciones entre
los años 2005, 2006 y 2007.
Se ha trabajado igualmente sobre la
cartografía y las ortofotos de la zona de estudio, incorporándose sus
resultados al texto.
Localización y descripción del
arroyo del almendrillo.
·
Acceso
al área de estudio.
El
tramo de ribera que se ha analizado se encuentra en la cabecera del Arroyo de
Talavera, término Municipal de Morón de la Frontera. A él se
accede desde la carretera de Morón a Pruna. Aproximadamente en el kilómetro
diez de dicha carretera aparece un amplio carril a la derecha, se trata de la
vía pecuaria Cordel de Olvera Antigua. Si se toma el carril, se accederá a una
llanura rodeada de pequeñas elevaciones conocida como La Nava. El carril discurre
junto a un vallado, dirigiéndose hacia un pequeño puerto. Tras superarlo,
desciende hasta el arroyo de las Carraolas. La vía pecuaria gira a la
izquierda, hacia el este, unos cien metros antes de llegar a una primera
cancela. Se deja atrás ésta, el arroyo acompaña al camino por la izquierda y el
Cerro de Los Yesos por la derecha, y se continua unos 500 m. hasta toparnos con una
segunda cancela, que dará paso a La Capellanía, zona alomada dedicada al cultivo de
cereal, desde este lugar se ve al suroeste un cerro más alto que los demás, el
Cerro de La Plata. El
camino atraviesa el arroyo de Las Carraolas y discurre acompañado de unos
cerros a su izquierda para, tras unas curvas, pasar junto a una pequeña
cantera, con laguna en su interior, que da paso al arroyo del Lentisquilo. Al atravesar
El Lentisquillo aparece el arroyo del Almendrillo y, más allá, el cortijo de La Párraga. En total se
han recorrido unos cinco kilómetros desde la carretera.
Figura III: Vista del área de
estudio.
·
Descripción
del arroyo del Almendrillo.
El pequeño arroyo del Almendrillo
tiene una longitud, desde su nacimiento hasta su unión con el arroyo del
Lentisquillo, que se une a él por su margen derecha, de unos tres kilómetros,
con anterioridad se le ha unido el arroyo de La Párraga, y aguas abajo se le
une por su margen derecha el arroyo de Las Encarnaciones o de Las Carraolas,
desde este lugar el arroyo comienza a denominarse Talavera o Navacerrada,
tributario del río Guadaíra.
Se trata de un arroyo de aguas escasas, que
soporta mal el estiaje, por lo que en los meses de verano se seca
completamente, aun así el periodo durante el cual presenta aguas corrientes es
amplio, desde finales de octubre o principios de noviembre hasta el mes de
mayo-junio, dependiendo del año hidrológico.
·
Descripción
sector de estudio.
El
tramo de arroyo que ha analizado comienza unos 100 m. antes de la unión con el
arroyo de La Párraga y finaliza con la unión del arroyo de El Lentisquillo, esto
supone una longitud de unos 600 metros, una anchura media de unos 23-24 metros,
una superficie aproximada de 1,4 hectáreas (14.197 m2.) y un perímetro de 1.317
m.
La
altura máxima sobre el nivel del mar es de 310 m.s.n.m. y la mínima de 300 m.s.n.m, por lo que la
diferencia de altura del arroyo, en el tramo estudiado, es de 10 metros, siendo por
tanto el porcentaje de desnivel de un 3 %, aproximadamente.
Figura IV: Sector de estudio.
Discurre
en dirección Sureste-Noroeste, teniendo como límites los siguientes:
- Por el Sur una valla metálica que lo separa
de una amplia zona cerealista que pertenece al cortijo de La Párraga, habiéndose
perforado a pocos metros del vallado un pozo.
- Por el Noreste limita con explotación
agrícola y el arroyo del Lentisquillo, que le separa de La Capellanía, y con cultivos
de cereal, que la separa de cerros cubiertos de encinas y monte bajo, donde aparecen
especies de vegetación mediterránea, y una antigua cantera de extracción de
yesos.
- Por el Suroeste limita con tierras de labor,
algunas encinas y retamares, que hacen de unión con el monte mediterráneo del
Cerro de los Poceros*, y una explotación de yesos fuera de uso.
La cubierta vegetal es continua en todo es
tramo estudiado salvo la ruptura provocada por un camino el su zona central y
un paso de animales justo antes de su unión con el arroyo de Las Carraolas.
Figura V: Vista general
del arroyo del Almendrillo y cerro de los Poceros.
*El
Cerro de Los Poceros es un monte compuesto por vegetación mediterránea de encinas, Quercus rotundifolia; acebuches, Olea europaea variedad sylvestris; lentiscos Pistacia lentiscus; aladiernos,
Rhamnus alaternus; jaras Cistus albidus, Cistus parviflorus, Cistus salvifolius; romeros, Rosmarinus officinalis; matagallos, Phlomis purpurea; retamas,
Retama sphaerocarpa; aulagas, Genista scorpius..... y numerosas herbáceas entre las que
destacaremos la presencia de orquídeas,
entre ellas la Ophrys holoserica.
Desde
este Monte observamos como todo el tramo se encuentra cubierto por un compacto
soto de ribera donde podemos destacar la presencia de una pequeña alameda en la
zona sur, donde un vallado metálico nos indica el límite de la finca denominada
La Párraga,
el inicio del estudio, y dos olmedas. El tránsito entre estas tres formaciones
arbóreas se realiza mediante un compacto espinar de ribera. Por contraposición
se observa que, el arroyo de La
Párraga, tras la valla mencionada, se encuentra transformado
en un mero canal de drenaje, mientras que El Almendrillo, mantiene aún, por
unos metros más su cubierta vegetal.
Figura VI: Conexión entre cerro de los
Poceros y arroyo del Almendrillo.
Todo
el conjunto se encuentra conectado al Cerro de Los Poceros. Por el suroeste a
través de dehesa y por el noroeste a través de monte bajo y cantera de yesos.
·
Descripción
geológica:
Como
señala el Mapa Geológico de España 1:50.000, Morón de la Frontera 1021/14-42, el
arroyo discurre por una llanura aluvial del Cuaternario (holoceno), compuesta
de limos, arenas y cantos, mientras que en los cerros que aparecen relacionados
con el arroyo es posible encontrar arcillas, margas, areniscas y yesos, no en
vano aparecen en los alrededores tres pequeñas canteras de yeso abandonadas,
así como algún afloramiento de calizas, dolomías y carniolas, todos ellos
pertenecientes al Trías.
Análisis de las unidades de vegetación.
En el
presente área en el que se ha realizado el estudio, se han identificado tres
unidades de vegetación principales que se analizan a continuación:
·
Alameda
con pradera húmeda.
Introducción:
Esta
alameda con pradera húmeda se forma por la unión del arroyo del Almendrillo y
el arroyo de La Párraga,
estando limitado al sur por un vallado metálico, al este por el arroyo de La Párraga y al oeste por El
Almendrillo, la unión se produce al noroeste, dejando en su interior un espacio
en forma de isla donde se desarrolla una pequeña pradera que muestra diferentes
arbustos y abundantes herbáceas. Esta pradera presenta una zona algo más
elevada a escasos metros de la valla.
Se
aprecia un menor impacto del ganado vacuno, lo que ha supuesto el buen desarrollo y conservación del
matorral en las márgenes del arroyo, aún así, esta presencia esporádica de
ganado ha favorecido la existencia de algunas herbáceas nitrófilas como Urtica urens y membranacea, Euphorbia helioscopica,
Plantago media, numerosos Trifolium,
sp….
Figura VII: Alameda con
pradera húmeda.
Estrato arbóreo, la alameda.
La
formación analizada se compone de álamos adultos que se disponen en el cauce
perteneciente al arroyo de La
Párraga, que aparece sin caudal, diez de ellos, los que
forman un grupo más compacto y homogéneo, se encuentran tras la valla. En el
interior de la pradera, junto al cauce anterior, se disponen el resto de álamos
adultos, en cambio, los más jóvenes, se pueden ver en las márgenes de ambos
cauces, en la pradera y en la confluencia de estos.
Se
realiza la medición de distintos ejemplares situados dentro de la parcela de
estudio dando como resultado que el mayor mide 168 cm. de perímetro a la altura
de pecho y el menor 127 cm., lo que nos da un DAP de 53,48 cm. y de 40,43 cm.,
respectivamente. En cuanto a la altura de estos ejemplares adultos podemos
calcularles por encima de los 10 metros y cercanos a los 15 metros. Como
curiosidad hemos constatado la presencia de varios nidos de pájaro carpintero, Dendrocopos majos, en estos álamos, se
sitúan estos a unos 6-8 metros de altura, lejanos de toda intrusión humana.
La
impresión general de la alameda es que disfrutan de buena salud y, la presencia
de los numerosos pequeños álamos y renuevos garantizan la continuidad de la
población.
Figura VIII: Alameda madura en
arroyo de la Párraga.
Estrato arbustivo.
Para
el análisis de esta formación vamos distinguir dos zonas:
o
La pradera húmeda, observamos la presencia de
arbustos dispersos y de poca entidad, reducidos a algunos ejemplares de Crataegus monogyna situados, salvo
excepciones, cercanos a las márgenes, varios Pistacia lentiscus y Chamaerops humillis, que aparecen al sur, en
contacto con la zona más elevada y, Retama
sphaerocarpa, ésta distribuida homogéneamente por toda la pradera.
Destacamos la presencia de varios ejemplares de álamos de pequeño porte.
o
En cuanto a la vegetación arbustiva, tanto en
el arroyo de La Párraga,
como en el arroyo de El Almendrillo, vemos que el cauce y las márgenes aparecen
con una densa cubierta donde es posible encontrar pequeños ejemplares de Populus alba, Pistacia lentiscus, Crataegus
monogyna, Rhamnus alaternus, Olea europaea var. sylvestris, Dafne gnidium…
y en los espacios más abiertos Rubus
ulmifolius acompañado, en menor medida, de ejemplares de Rosa sempervirens, Asparagus acutifolius…
En el conjunto apreciamos la combinación de esta formación con especies
trepadoras como Lonicera implexa, Brionia
dioica, Tamus communis, Smilax aspera, Clematis cirrhosa, Galium
aparine o Vitis vinifera var. sylvestris…
Como
podemos ver se trata de especies, en general, propias del bosque mediterráneo,
hasta el punto de que alguna encina se ha establecido en el talud y escasos
centímetros del cauce del arroyo, que han encontrado en este ecosistema el un
refugio adecuado para su supervivencia.
El estrato herbáceo.
Al
igual que en el apartado anterior habría que distinguir entre el cauce y
márgenes de los arroyos de La
Párraga y El Almendrillo, donde al ser muy tupida la
formación arbustiva, impide que la luz penetre en su interior por lo que las
herbáceas se ven obligadas a restringir su presencia al exterior del soto, por
lo que son escasas las especies relacionadas especialmente con las riberas,
apareciendo diversas compuestas, leguminosas, malváceas, apiáceas-umbelíferas,
gramíneas, borragináceas, cariofiláceas, cruciferáceas… sometidas a la continua
presión de la roturación, al uso del herbicidas y al pastoreo.
En
cuanto al estrado herbáceo que se aprecia en la pradera húmeda, este se
encuentra especialmente desarrollado y diversificado debido, a la presencia de
esta pradera húmeda, que ocupa una superficie de unos 1.000 m 2,
aproximadamente. Del estudio general de la pradera hemos constatado la
presencia de especies pertenecientes a más de 24 familias, entre ellas: apocináceas, aráceas, borragináceas,
cariofiláceas, compuestas, convolvuláceas, crucíferáceas, euforbiáceas, escrofulariáceas, geraniáceas,
gramineas, iridáceas, labiadas, leguminosas, liliáceas, malváceas,
orquidiáceas, papaveráceas, plantagináceas, primuláceas, ranunculáceas,
resedáceas, rubiáceas, apiáceas-umbelíferas, urticáceas, valerianáceas...
· Olmedas.
En el
sector del arroyo objeto de estudio podemos ver dos núcleos formados por
pequeñas olmedas, Ulmus minor:
La
primera de ellas con una longitud de 65 m, una
superficie cercana a los 850 m2. y una anchura media de 13,07 m.. La
olmeda se distribuye a lo largo de ambas márgenes;
La
segunda con una longitud de 60
metros, una anchura media de 9,6 m. y una superficie de 550 m2., los olmos se
disponen preferentemente en la margen derecha del arroyo, lo que ha permitido
la aparición de abundantes zarzas, carrizos y varios ejemplares de tarajes.
Figura IX: Formaciones de olmos (olmedas)
del arroyo Almendrillo.
Se
trata de olmedas jóvenes, con ejemplares de altura muy similar, todos ellos
inferiores a 10 m.,
y donde no se aprecian ejemplares excepcionales ni ejemplares caídos.
Figura X: Primera olmeda del arroyo
Almendrillo.
La
formación aparece acompañada de algunas especies arbustivas y trepadoras, entre
otras, Rubus ulmifolius, Rosa
sempervirens, Smilax aspera, Lonicera implexa, Galium aparine, Rhamnus alaternus,
Pistacia lentiscus, Crataegus monogyna, Tamarix gallica,. ... que se sitúan en el exterior de la alameda,
en contacto con los campos de cultivos.
Las
herbáceas que podemos encontrar en el interior de la alameda son escasas, Arum italicum, Stellaria media, Ranunculus
ficaria…. Siendo más abundante en la zona de contacto con los campos de
cultivo, al ser esta franja el lugar más soleado, por tanto, estamos hablando
es especies no relacionadas obligatoriamente con las riberas, destacando
gramíneas, compuestas, cruciferáceas, malváceas, cariofiláceas, leguminosas,
apiáceas-umbelíferáceas….
· Espinares
La
conexión entre la alameda y las olmedas se produce mediante matorral claramente
espinoso, espinares de ribera, donde destacan sobremanera la zarza (Rubus ulmifolius), acompañada en menor
medida de rosales silvestres (Rosa
sempervirens y canina), madreselvas (Lonicera
implexa), esparragueras (Asparagus
acutifolius), escasos majuelos (Crataegus monogyna)…
Figura XI: Espinar entre olmedas.
En los
lugares donde se produce el contacto con el Cerro de Los Poceros, aparecen
junto a las márgenes especies como encinas (Quercus rotundifolia), lentiscos (Pistacia lentiscos), aladiernos (Rhamnus alaternus), espinos negros (Rhamnus licyoides), matagallos (Phlomis purpurea), jaras (Cistus sp), retamas (Retama
Sphaerocarpa), …
El
estrato herbáceo de esta formación se comporta como en el caso de las alamedas,
con alguna salvedad, ya que al ser una formación más baja, permite que en cauce
se desarrollen algunas especies distintas, destacando los carrizos (Phragmites communis) y la unciana
(Dorycnium rectum).
En las
zonas de ruptura del espinar podemos ver especies más propias de zonas húmedas
como Lythrum junceum, berro (Rorippa nasturtium-aquaticum), unciana
(Dorycnium rectum), junto a especies
nitrófilas en las márgenes, leguminosas, compuestas, urticáceas…
·
Nombres
científicos y comunes de las plantas del arroyo del Almendrillo.
Esta
relación ha sido elaborada a partir de los datos tomados directamente sobre el
terreno, las especies clasificadas en laboratorio y el material fotográfico,
por tanto toda la información pertenece a la situación del arroyo del
Almendrillo el día 14 de abril de 2007.
A) Especies arbóreas y arbustivas
Anacardiáceas:
- Pistacia lentiscus L. (Lentisco)
Apocináceas:
- Nerium
oleander L. (Adelfa)
Cistáceas:
- Cistus albidus L.
(Estepa blanca, jaguarzo blanco)
Fagáceas:
- Quercus rotundifolia Lam.
(Encina)
Labiadas:
- Teucrium fruticans L.
(Olivilla, salvia amarga)
Leguminosas:
- Retama sphaerocarpa L.
(Retama)
Liliáceas:
- Ruscus aculeatus L.
(Rusco, brusco, arrayán salvaje)
Oleáceas:
- Olea europaea L, var. Sylvestris Brot. (Acebuche, olivo
silvestre)
- Jasminun frutican L.
(Jazmín silvestre)
Palmáceas:
- Chamaerops humilis L.
(Palmito)
Rhamnáceas:
- Rhamnus alaternus L.
(Aladierno)
- Rhamnus lycioides L.
(Espino negro)
Rosáceas:
- Crataegus monogyna Jacq. (Majuelo, espino
albar)
- Rubus ulmifolius Schott
(Zarza, zarzamora)
Salicáceas:
- Populus alba L.
(Álamo blanco)
Santaláceas:
- Osyris alba L.
(Retama loca)
Tamaricáceas:
- Tamarix gallica L.
(Taraje, taray)
Timeleáceas:
- Daphne gnidium L.
(Torvisco, matagallinas)
Ulmáceas:
- Ulmus minor Miller (Olmo)
b) Especies trepadoras
Caprifoliáceas:
-
Lonicera implexa Aiton (Madriselva)
Cucurbitáceas:
- Bryonia
cretica Subsp. dioica Jacq. (Brionia, nueza)
Dioscoreáceas:
-Tamus
communis L. (Nueza negra, vid negra, canduerca, espárrago de caña)
Liliáceas:
- Smilax
aspera L. (Zarzaparrilla, zarza
morisca, uva de perro)
Ranunculáceas:
-
Clematis cirrhosa L. (Clemátide de Virginia)
Rosáceas:
- Rosa sempervirens L.
(Rosa mosqueta común)
Rubiáceas:
-
Galium aparine L. (Amor del hortelano)
Vitáceas:
- Vitis
vinifera subsp. Sylvestris C. C.
Gmelin (Vid silvestre)
c) Especies herbáceas:
Apocináceas:
- Vinca
minor L. (Hierba doncella, vincapervinca)
Aráceas:
- Arum italicum Miller
(Jaro, Aro)
- Arisarum vulgare Targ.-Tozz
(Dragoneta Menor, candilitos, frailecillos, candilejas...)
Borraginácea:
- Anchusa azurea Miller (Chupamieles azul)
- Anchusa undulata L. (Chupamieles
ondulada)
- Borago officinalis L (Borraja)
- Cynoglossum creticum Miller (Cinogloso
azul)
- Echium plantagineum L. (Viborera)
- Nonea vesicaria (L.)
Reichenb. (Vergonzosa)
Cariofiláceas:
- Silene alba (Miller)
E. H. L. Krause (Silene blanca)
- Silene Gallica L.
(Carmentilla)
- Silene vulgaris
(Moench) Garcke (Colleja, cascabelillos)
- Stellaria media (L.)
Vill. (Alsine)
Compuestas:
-
Anacyclus radiatus Loisel. (Albojar, manzanilla loca)
- Atractylis cancellata L. (Cardo
enrejado, farolitos de cardo)
- Bellis sylvestris Cyr. (Margarita de
monte, maya, bellorita)
- Carducenllus caeruleus (L.)
C. Presl (Cardo santo azul, cardo arzolla azul)
- Carduus tenuiflorus Curtis (Cardo común)
- Centaurea cyanus L.
(Aciano, azulejo, ciano)
- Centaurea pullata L. (Centaurea)
- Calendula arvensis L.
(Caléndula, maravilla, hierba del podador)
-
Coleostephus myconis (L.)
Rchb. f. (Giraldilla)
- Crepis vesicaria L.
(Mosquitera)
- Galactites tomentosa Moench (Cardota, cardo
cuajaleches)
- Pallenis spinosa (L.9 Cass. (Ojos de
buey, árnica, hierba de Santa Rosa, castañuela)
- Scorzonera laciniata L.
(Almirones, Zaragallos)
- Silybum marianum (L.) Gaertn. (Cardo
mariano, Cardo borriquero, Cardo de María)
- Sonchus asper (L.) Hill (Cerraja áspera)
- Sonchus oleraceus L. (Cerraja, cerrajón,
lechecino)
Convolvulácea:
- Convolvulus arvensis L. (Correhuela
menor)
Cruciferáceas:
- Diplotaxis virgata (Cav) DC. (Jaramago
amarillo)
- Diplotaxis erucoides (L.)
DC. (Jaramago blanco, oruga silvestre)
- Raphanus
raphanistrum L. (Rábano silvestre)
-
Rapistrum rugosum (L.)
All. (Rabanilo)
- Rorippa
nasturtium-aquaticum (L.) Hayek (Berro)
Cyperáceas:
- Scirpus holoschoenus L. (Junco común)
Dipsacáceas:
- Scabiosa atropurpurea L.
(Escobilla morisca, escabiosa)
Euforbiáceas:
- Euphorbia exigua L. (Lechetrezna,
romeral)
- Euphorbia helioscopica L. (Lechetrezna,
leche interna, girasol)
Escrofulariáceas:
- Bellardia trixago (L.) All.
(Gallocresta)
- Linaria viscosa (L.) DUM. Cours.
(Conejito pegajoso)
- Perentucellia viscosa (L.) Caruel
(Algaravía viscosa)
Geraniáceas:
- Erodium ciconium (L.) L`Hér (Cigueñas,
relojes)
- Erodium primulaceum
(Lange) Welw. ex Lange (Aguja de pastor, peine de Venus, relojitos)
- Geranium molle L.
(Geranio de los caminos)
- Geranium rotundifolium L.
Poáceas-Gramíneas:
- Aegilops geniculata Roth (Rompesacos,
trigo bastardo)
- Avena sterilis L. (Avena loca, Ballueca)
- Bromus
diandrus Roth (Rompe sacos)
-
Bromus lanceolatus Roth
(Cebadilla)
- Dactylis glomerata L. (Grama de
jopillos)
- Hordeum marinum Huds. (Cebadilla marina)
- Lamarkia aurea (L.) Moench (Cepillitos
de la Virgen)
- Lolium
rigidum Gaudim (Cizaña)
- Phalaris
brachystachys Link (Rabo de cordero)
- Phragmites
communis Trin. (Carrizo común)
- Poa trivialis L.
(Grama de agua)
Iridáceas:
- Gladiolus
communis L. (Gladiolo)
Labiadas:
- Stachys
ocymastrum (L.) Briq. (Albahaca campesina)
- Salvia verbecana L. (Hierba de Santa
Lucía, gallocresta)
Leguminosas:
- Anthyllis tetraphylla L. (Trébol de pezón e vaca)
- Dorycnium rectum (L.) Ser. In DC (Unciana)
- Coronilla sp.
- Lathyrus
Clymenum L. (Alverja, guijola, orova)
-
Medicago polymorpha L. (Carretón común)
- Scorpiurus sp.
- Trifolium
angustifolium L. (Jopitos)
- Trifolium campestre Schreb. (Trébol
dorado)
- Trifolium fragiferun L. (Trébol fresero)
- Trifolium stellatum L. (Trébol estrellado)
- Trifolium tomentosum L.
(Trébol de algodón)
- Vicia lutea L.
(Arveja amarilla)
- Vicia sativa L.
(Arveja común)
Liliáceas:
- Allium neapolitanum L. (Ajo de Nápoles)
- Asparagus acutifolius L. (Espárrago
triguero)
- Asphodelus albus Miller (Asfódelo
blanco, Gamón)
- Muscari comosum (L.) Miller (Ajos de la
cigüeña, hierba de amores)
- Muscari neglectum Guss. Ex Ten.
(Nazarenos, cebollita de milano)
- Ornithogalum narbonense L.
(Varita de San José)
Lináceas:
Linum
tenue Desf. (Lino amarillo)
Litráceas:
- Lythrum
junceum Banks & Sol.
Malváceas:
- Malva parviflora L. (Malva de flor
chica)
- Malva silvestris L.
(Malva común)
Orquidiáceas:
- Ophrys speculum (ciliata) Link (Flor del espejo, espejo de Venus)
- Ophrys fusca Link. (Gallos)
- Ophrys lutea Cav. (Flor de la abeja
amarilla)
-
Serapias vomeracea (Burm) Briq.
Papaveráceas:
- Fumaria capreolata L. (Conejillos,
fumaria, palomilla)
- Papaver rhoeas L. (Amapola, amapola
común, ababol)
Plantagináceas:
- Plantago lanceolata L. (Llantén menor)
- Plantado logopus L.
(Pie de liebre)
- Plantago major L.,
(Llantén major, lengua de carnero)
Poligonáceas:
- Polygonum persicaria L. (Persicaria,
duraznillo)
Primuláceas:
- Anagallis arvensis L. (Muraje macho)
Ranunculáceas:
- Nigella damascena L. (Arañuela)
- Ranunculus acris L. (Botón de oro)
- Ranunculus ficaria L. (Celidonia menor)
- Ranunculus muricatus L. (Botón de oro,
ensalada de ranas, pata de gallo)
Resedáceas:
- Reseda luteola L. (Gualda, gabarro)
Rosáceas:
- Sanguinosorba hybrida (L.) Nordborg
Rubiáceas
-
Sherardia arvensis L. (Serardia)
Tifáceas:
- Typha angustifolia L. (Espadaña)
Umbelíferas:
- Conium maculatum L. (Cicuta, perejil
lobuno)
- Daucus carota L. (Zanahoria)
- Foeniculum vulgare Mill. (Hinojo)
- Thapsia villosa L. (Zumillo)
Urticáceas:
- Urtica membranacea Poir. (Ortiga
caudada)
- Urtica urens L.
(Ortiga menor)
Valerianáceas:
- Centranthus calcitrapae (L.) Dufresne
- Fedia cornucopiae (L.) Gaertn
(Trompetillas)
Conclusiones.
En la
cuenca alta del río Guadaíra, la formación predominante en los arroyos es el
espinar de ribera, compuesto fundamentalmente por zarzas, acompañadas de
algunas otras plantas espinosas y trepadoras, las formaciones arbóreas se
reducen en muchas ocasiones a ejemplares sueltos de fresnos, álamos, olmos y
excepcionales quejigos, la presencia de masas arbóreas compactas son escasas,
aún así podemos destacar la presencia de algunas pequeñas olmedas como en
arroyo Martín, arroyo de Los Tres Pozos y arroyo de La Florida, donde podemos ver
algunos ejemplares de gran porte, y algunas alamedas, como en el arroyo
anterior y en el arroyo de Los Tres Pozos. El arroyo del Almendrillo se enmarca
en esta excepcionalidad al tener la presencia de una alameda madura en
progresión y dos olmedas que serán objeto de estudio.
En el
marco de la situación general que sufren las riberas, podemos decir que el
sector del arroyo almendrillo que hemos analizado, se encuentra en una estado
aceptable de conservación, bien es cierto que es el espinar de ribera la
formación dominante, pero la presencia de dos olmedas jóvenes y sobre todo de
de una alameda en clara progresión, ya extendida por la pradera y los causes de
ambos arroyos, del Almendrillo y La Párraga, hacen pensar que, si la presión de
factores externos: incremento de los espacios roturados, abuso de los herbicidas y pesticidas y sobre todo incremento
de la carga ganadera, abusivas, la formación arbórea irá ganando terreno, hasta
conseguir a medio plazo la presencia de un excepcional bosque de ribera, que
actuará, como ya lo viene haciendo de un excelente refugio de biodiversidad.
· Materiales utilizados.
Cartografía utilizada:
Mapa
topográfico del Ejercito 1:50.000.
Mapa
topográfico 1021-III, Pozo Amargo, del Instituto Geográfico Nacional a escala
1:25.000.
Mapa
topográfico de Andalucía 1:10.000- 1021-23 (I.C.A.).
Vuelo
de Andalucía en color 1:60.000-1021 S/4 (I.C.A.).
Vuelo
de Andalucía en blanco y negro 1:5.000 (I.C.A.).
Mapa geológico de España. Serie Magna, 1:50.000. Hoja 1021 “Morón de la Frontera”. Instituto
geológico y minero de España. (IGME). Madrid. 1974.
Material fotográfico:
Durante
las jornadas de campo en el arroyo Almendrillo fue recogido abundante material
fotográfico, que se ha sumado al recogido por Juan Pablo Morilla Cala en marzo
del año 2006 y Cristóbal Raya Sancho el día 24 de diciembre de 2005 y que
amablemente han cedido para este trabajo.
Bibliografía:
Benito
Valdés, Salvador Talavera y Emilio Fernández, “Flora Vascular de Andalucía
Occidental”. Editorial KETRES. Barcelona, 1987.
- Oleg Polunin.
“Guía de Campo de las Flores de Europa”. Editorial OMEGA. Barcelona 1991.
- Oleg Polunin y
B. E. Smithy. “Guía de Campo de las Flores de las flores de España”. Editorial
OMEGA. Barcelona, 1981.
- Bayer, Buttler, Finkenzeller y Grau. “Plantas del Mediterráneo” Guías de
la naturaleza Blume. Editorial BLUME. Barcelona, 1995.
-
Abelardo Aparicio, Carola Pérez y Guillermo Ceballos. “BOSQUES-ISLA de la
provincia de Cádiz”. Edita Junta de Andalucía. Digital Impresión. Jerez, 2001.