jueves, 26 de agosto de 2021

LA BARRANCA ALTA, RÍO Y RANCHOS

 

La Barranca Alta.

La ruta tiene 7-8 km., es de dificultad media y de una duración de tres horas.

Desde Alcalá de Guadaíra tomaremos la A92, dirección Arahal. Muy pronto dejaremos atrás el Arroyo del Salado. Estaremos muy pendientes para tomar la primera salida, que nos incorporará al Cordel del Término o de La Camorra. Lo seguiremos hasta llegar a la pasá de Utrera, el punto donde comienza la ruta de hoy. 

Pasá de Utrera, el punto de partida de la ruta.

El primer tramo, de un kilómetro, discurre por el Cordel de Mairena; nombre que toma la vía pecuaria que traemos, una vez que cruza el río Guadaíra. Los primeros cuatrocientos metros son de subida, la única de todo el recorrido. Desde esta rampa merece la pena admirar las vistas del serpenteante río y la figura que forma el escarpe de Los Alcores en el horizonte.

Las ruinas del rancho de El Comandante, con higuera.

Nuestro primer contacto con la Cañada Real de Morón y la meseta de Matallana se encuentra precedido por unos olivos. Antes de continuar por la cañada nos aproximaremos a las ruinas de lo que fue el rancho de El Comandante,  distante unos seiscientos metros, y que ya divisaremos frente a nosotrosUn solitario eucalipto, testigo de una hilera hoy desaparecida, nos dará paso a sus ruinas, que sobreviven abrazadas por higueras bravías y neumáticos viejos semienterrados.

Los más mayores cuentan que en el cordel de Mairena existió una choza con muros de material y techumbre vegetal habitada por una familia alcalareña de pastores. Se piensa que la construcción del rancho, a primeros de los años cuarenta del siglo pasado, a la altura de la choza, pudo ser la causa del desplazamiento de los pastores a la Barranca Alta, donde permanecieron algún tiempo hasta el abandono definitivo de la zona. También sitúan allí una coplilla atribuida a Fernando “El Gasta”, coplilla que  cuestionaría que se cubriesen las necesidades proteínicas mínimas de los jornaleros que trabajaban en el rancho por un jornal y “mantenidos”:  

“En el rancho El Comandante han tocado a garbanceta y aquel que no acuda pronto le cuesta cuatro pesetas.” 

Desde el rancho regresaremos a la Cañada Real de Morón para continuar hasta la Barranca Alta. En este trayecto, de aproximadamente dos kilómetros, predominan los olivos a nuestra izquierda y la tierra calma a nuestra derecha; una amplia zona conocida como Matallana donde se siembran girasoles, trigos y garbanzos, aunque no siempre fue así, hasta el primer tercio del siglo XX predominaron los palmares y las dehesas.[i]

Cañada Real de Morón.

Conviene recordar que la vía pecuaria por donde transitamos fue recuperada, parcialmente, en 2009. Se dijo que estábamos ante un corredor ecológico para conectar espacios naturales. Transcurridos más de una docena de años, continúa usurpada en todo su recorrido, ha perdido una parte importante de la repoblación que se llevó acabo y las labores de mantenimiento no han existido nunca. 

La Barranca Alta.

Una vez en la Barranca Alta conviene saber que constituye una red de drenaje o depresión provocada por el agua que se mueve por la acción de la gravedad hasta desembocar en el río Guadaíra. En esta zona han aflorado materiales que demostrarían la existencia de un ambiente de tipo palustre entre hace 48.000 y 35.000 años y que se prolongaría hacia Los Alcores.[ii]

Desde el río Guadaíra podemos ver el perfil de la meseta de Matallana.

Bajaremos con cuidado unos doscientos cincuenta metros hasta situarnos junto al cauce del río Guadaíra. A unos cien metros, corriente abajo, el escaso caudal, sobre todo en época de estío, nos permitirá vadearlo para continuar por la margen derecha en el sentido de la corriente.

Los eucaliptos predominan en el río.
Enea o espadaña (herbácea del género Typha o familia de las tifáceas)
Aro (Arum maculatum).

El predominio de los eucaliptos en este tramo de la ribera es abrumador, a pesar de ello, también disfrutaremos de otras especies arbóreas, arbustivas y plantas como: fresnos, tarajes, olmos, álamos, sauces, eneas, mastrantos…, que conforman un hábitat refugio para gran número de especies animales.

Rancho de Mellado.

También podemos ver fresnos, olmos...

Durante los primeros quinientos metros iremos flanqueados por olivos a nuestra derecha. Luego la tierra calma nos dejará ver el cortijo de Mellado, distante de nosotros unos doscientos cincuenta metros. Llegado a un punto daremos con el tributario arroyo de Las Albinas que, cubierto por una tupida e impenetrable olmeda, nos sacará al carril de servicio que discurre paralelo a la autovía. 

El rancho de Las Lomas.

Desde este punto podemos decidir si regresar por la pista hasta la pasá de Utrera o continuar por la margen del río sorprendiéndonos a cada paso que demos. Si hemos optado por lo segundo, conoceremos los restos de lo que fue el Cortijo de Las Lomas; un entorno en el que han prosperado imponentes higueras y que sirve de cobijo a la araña Argiope trifasciata. 

 

Argiope trifasciata.

Cardos borriqueros con el río al fondo.

río con escaso caudal en verano.

Sin más dilación continuaremos hasta el punto de partida, que ya lo tenemos a la vista, la pasá de Utrera.

Mapa de la ruta.


Francisco José Gavira Albarrán

 

 



[i]                 Memorias Históricas de la Villa de Alcalá de Guadaíra. Leandro José de Flores 1833. Matallana perteneció al Consejo de Alcalá de Guadaíra

[ii]                Medio Físico, dinámica, geoecológica, paisaje vegetal y ordenación de los recursos naturales de la campiña del río Guadaíra.  David Cristel Gómez Montblanch 2010.  “Este al colmatarse favoreció la instalación de la red de drenaje actual en un cambio hacia un modelo exorreico que propició el vaciado de un gran volumen de depósitos hacia el Guadalquivir a través de un cauce cada vez más angosto e incidido que en la actualidad atraviesa Los Alcores.”



martes, 17 de agosto de 2021

Por el cordel de Gallegos desde la hacienda de Miravet

 

Hacienda de Miravet al fondo entre olivos.

La ruta discurre completamente dentro del término municipal de Alcalá de Guadaíra. Es de diez kilómetros (lineales), de dificultad baja y de tres a cuatro hora de duración. El periodo para realizarla es de octubre a mayo y el óptimo de noviembre a abril. Su calificación: Sobresaliente.

Descripción del cordel de Gallegos:

“Sale de la Cañada de Matalajeme antes de llegar a la hacienda de La Pintá, camina entre Los Bujadillos y La Pintada con dirección a la línea límite de este término con el de Utrera, al llegar al cual lo sigue en un kilómetro aproximadamente, desprendiéndose de ella para dirigirse en línea recta a cruzar la carretera de Madrid-Cádiz por la casilla de Peones Camineros, llamada de Mendieta. Atraviesa el camino de Alcalá de Guadaíra a Utrera, pasa entre el cortijo de Sanabria y otro cortijo (El Gallego), deja a la izquierda un rancho (La Armada) y a la derecha el cortijo de La Palma, cruza también el cordel de Mairena del Alcor a Utrera, que aparece muy intrusado, pasa por tierras del cortijo de Marchamorón, cruza también el cordel de Carmona a Utrera y ya por la línea divisoria de este término de Alcalá y el de Utrera, sigue hasta su terminación en la Cañada Real de Piedra Hincada, después atraviesa el ferrocarril de Utrera a Morón y a Osuna. La anchura de esta vía es variable a lo largo de su recorrido, pero nunca inferior a 45 varas (37,61 m.). En lo sucesivo se le considerará necesaria con una anchura uniforme de cuarenta y cinco varas. Su recorrido total es de unos 22 kilómetros”.

En el cordel de Gallegos se respeta en muchos puntos la anchura de 37,50 metros.

Esta ruta se encuentra a unos diez kilómetros, por carretera, del núcleo urbano de Alcalá de Guadaíra, por lo que tendremos que desplazarnos en autobús¹ hasta al lugar indicado para iniciar el recorrido.

Tomaremos dirección Utrera, para que, al llegar a la altura de la estación de Don Rodrigo, a unos diez kilómetros de Alcalá, hagamos un giro y nos dirijamos a un camino que queda a la izquierda de la carretera. Se trata de la vía pecuaria denominada cordel de Gallegos.

Palmas y encinas.

Ahora empezamos a ver junto al carril un gran basurero que crece día a día, una de las consecuencias de permitir el desarrollo de urbanizaciones ilegales.

Basurero en el cordel de Gallegos.

El carril toma su mayor anchura donde se encuentra el basurero. A nuestra izquierda, vallado de chumberas (Opuntia ficus-indica), y entre ellas un camino que da acceso al cortijo de la Armada, que nos podría llevar hasta el descansadero de Trujillo y el puente de la Vega. A la derecha vemos un camino que se dirige a Utrera, el camino del Alba. De frente continúa el cordel, y bajo una encina podemos ver un monolito conmemorativo de la Hermandad del Rocío de Puente Genil, pues aquí hace una parada en su peregrinar hacia la aldea.

Dejamos atrás el lugar y, a nuestra derecha, vemos las ruinas de una edificación; y algo más cerca del camino, una alberca y un pozo enorme. Cerca existe una entrada en rampa que nos puede llevar hasta lo más profundo del pozo, pero es realmente peligroso. Continuamos el camino, ahora en un carril más pequeño, y vemos pronto otra edificación a nuestra derecha. Es la hacienda de la Palma, completamente en ruinas. A nuestra izquierda nos va a acompañar un vallado de chumberas, hasta que lleguemos al cordel de Mairena y la finca de Rosalejos. Las palmas y las retamas van a ser la vegetación dominante en este tramo.

Cortijo de Sanabria.
Hacienda de La Palma.

La finca de Rosalejos destaca por estar vallado por un enorme seto de un arbusto espinoso llamado rhannus licioides. La vegetación es abundante en el lugar: espinos, rosales, coscojas, palmas, jaras, retamas, lentiscos… Al terminar la finca, llegamos a un arroyo, el de Rosalejos que vierte sus aguas en el Guadairilla.

Rosa Mosqueta, muy común en el Cordel de Gallegos.

Al entrar en las tierras de Marchamorón, el cordel empieza a perder anchura y vegetación, aunque todavía veremos algunas palmas. El arroyo de Guadairilla se acerca hacia el cordel hasta ir paralelos durante el último kilómetro. Rápidamente llegamos al cordel de Utrera a Carmona, hoy día convertido en una carretera donde nos estará esperando el autobús.

Otra imagen del Cordel de Gallegos.
Mapa de la ruta. 

¹Ruta que realizó Antonio Gavira Albarrán para el grupo ecologista Alwadi-ira–Ecologistas en Acción el 22 de marzo de 2008.